Evaluación formal: Es un
proceso de aplicación de pruebas psicométricas, pruebas proyectivas y
de entrevista al niño/a y al cuidador principal; del que obtendremos,
mediante un informe psicológico, una descripción completa del
desempeño y estado del área conductual, social, emocional, intelectual
y familiar del menor.
Exploración o tamizaje:
Proceso de exploración en el que juntos descartamos problemas de
neurodesarrollo y comprendemos las dificultades a nivel conductual,
emocional y familiar del niño/a.
Para padres, madres o cuidadores:
Consiste en sesiones individuales para trabajar problemáticas
asociadas a la interacción con sus hijos.
Para niños y adolescentes:
Consiste en sesiones individuales para trabajar dificultades
emocionales o conductuales bajo un enfoque contextual.
Para mujeres embarazadas, padres, madres o cuidadores:
Consiste en 4 o 6 sesiones personalizadas relacionadas a temas de
crianza, valores, establecimiento de límites, comunicación con los
hijos y otros aspectos relacionados al bienestar psicológico en la
familia.
Niños y adolescentes:
Consiste en 4 o 6 sesiones personalizadas para trabajar un tema en
específico relacionado a duelo de mascotas/ser querido, identificación
de emociones, hábitos saludables, habilidades sociales o
autoconocimiento.